Empresario y deportista con un gran potencial humano
Leyenda del béisbol con increíble potencial humano, originario de México y nacionalizado estadounidense, sobresaliente pitcher de las Ligas Mayores de Béisbol (MLB) entre 1980 y 1997.
Desde la posición de pitcher —jugador que lanza la pelota al bateador—, se convirtió en el máximo ídolo de Los Ángeles Dodgers, franquicia de la MLB del estado de California que ha pasado a la historia tanto por ser uno de los equipos con más series mundiales como por las figuras que han jugado con su playera.
Valenzuela demostró su potencial implacable en los estadios a lo largo de su extensa carrera; logró varios hitos y récords gracias a su sobresaliente efectividad que se impuso en las estadísticas históricas del béisbol.
Nació en el año 1960 en el seno de una familia numerosa y muy humilde en un pequeño poblado del estado de Sonora llamado Etchohuaquila. Sus padres se dedicaban a labores del campo, mientras que él y sus hermanos encontraron en el béisbol una pasión que los alegró durante su difícil infancia.
De inmediato demostró sus sobresalientes aptitudes para el deporte, pues en 1977 fue fichado por los Mayos de Navojoa (uno de los equipos más veteranos de la liga mexicana); luego pasaría por los Tuzos de Sinaloa, los Ángeles de Puebla, y los Leones de Yucatán. En 1979 se produjo su salto internacional por su contrato con Los Ángeles Dodgers, un emblema del béisbol en la actualidad y que indudablemente él ayudó a construir con su talento.
Su debut fue en la temporada de 1981 cuando fue tomado en cuenta por Tom Lasorda. Debido a la lesión de Jerry Reuss a unos minutos del duelo inaugural, se tomó la decisión de que Valenzuela fuera quien abriera el juego. A partir de ese instante comenzó la llamada Fernandomanía gracias a su famoso tirabuzón, terminando ese año con récord de 13-7, siendo recordado por su actuación en el juego 3 de la Serie Mundial ante los Yankees, misma en donde los Dodgers se llevaron el título.
Al terminar la campaña de 1981, se llevó la condecoración como Novato del Año y el premio Cy Young. Tiempo después, en 1986, selló su año con 21 victorias y, en 1990, logró el juego sin hits ni carreras (mismo récord que rompe Dave Stewart unos minutos antes que él). Fue una lesión en su brazo lanzador la que lo dejó sin poder participar en el título de Serie Mundial que los Dogders consiguieron en 1988, cuando vencieron a los Atléticos de Oakland. En 1997 se retiró de la práctica deportiva como una estrella absoluta. Tras su retiro incursionó como comentarista de los juegos de los Dodgers en la radio californiana.
Destacando nuevamente su gran Potencial Humano, F.V. es al día de hoy un empresario deportivo que gestiona en conjunto con inversionistas yucatecos al equipo de la Liga Mexicana, los Tigres de Quintana Roo con sede en Cancún.
Ganó muchos premios a lo largo de su trayectoria deportiva: Más blanqueadas en un año (1981), Guante de Oro (1986) y Bat de Plata (1981-86-89), entre otros, y en 2018 los Dodgers anunciaron la creación de un espacio denominado Leyendas del Béisbol (que emula a los salones de la fama), donde colocarán placas de sus miembros homenajeados, y por supuesto que Fernando será parte del mismo.
“El béisbol ha evolucionado en todo, pero yo me quedo con mi época”
“Mi estilo no era de fuerza ni de velocidad. Ahora te ponen la velocidad en una pizarra después de cada lanzamiento. Ha cambiado todo. Es el mismo béisbol, las mismas reglas, pero son otras épocas”
Redacción por: Revista Potencial Humano