El desarrollo de cuatro áreas para enfrentar mejor la situación actual
La pandemia derivada del COVID 19 ha obligado a que nos confinemos en nuestros hogares. Estamos llegando a final de año y la situación sigue para muchos, muy complicada. Esto ha implicado que los roles sociales que hacíamos en diferentes espacios ahora sean todos desarrollados en el hogar. Así, la casa se convierte en gimnasio, escuela, oficina, centro de recreo, restaurante, etc. Adicionalmente nos ha obligado a estar con nosotros mismos. Un hecho que para muchos es fácil, pero para otras personas implica un desafío no tener convivencia con los demás.
El ser humano, desde mi perspectiva, debe desarrollarse en cuatro áreas que deben ser fomentadas y desarrolladas de manera integral: Lo físico, lo intelectual, lo emocional y lo espiritual. Por ello, en esta ocasión quiero darte algunos consejos que pueden ser de utilidad en este confinamiento, a efecto de que puedas enfrentar mejor la situación y veas el lado positivo de estar en casa en estos cuatro aspectos.
- En lo físico. En efecto, somos lo que comemos. Aprovecha para revisar y concientizar lo que consumes. La ingesta de alimentos es fundamental no solo para tu desarrollo y sana alimentación, sino que se ha comprobado que una adecuada dieta constituye la base fundamental de un cuerpo sano. En la alimentación te sugiero que cuando comas lo hagas cuando tengas hambre, no comas enojado o triste. Cuando pasa esto último, relacionas la falta de afecto con los alimentos y muy en particular, los postres. Adicionalmente, aprovecha para crear una rutina de ejercicios. Hoy con el mundo de las redes sociales puedes practicar ejercicios de preferencia por la mañana para sentirte mejor. En Youtube, te recomiendo desde los programas de entrenamiento en casa de transiciones (que incluyen cardio y fuerza) hasta programas de Tai Chi y Yoga. Decía un amigo “el ejercicio no es opcional, es parte de la vida cotidiana”. Recuerda que si tienes un cuerpo sano tus defensas son mayores y tendrás menos posibilidades de contraer enfermedades. ¡Hoy más que nunca nos necesitamos sanos!
- En el ámbito intelectual. Aprovecha esta temporada para hacer una lista de libros que has querido leer. Adicionalmente, haz una relación de aquellas cosas nuevas que has querido aprender. Puede ser un idioma, un instrumento o un curso que fomente tu creatividad. Recuerda que lo que leemos nos da más elementos para entender nuestro alrededor. Una buena práctica para ejercitar tu cerebro es enseñarle cosas nuevas. Las redes neuronales se desarrollan mejor cuando traes información nueva y relacionas conceptos, ideas, etc. La lectura, te permite generar un diálogo con el autor, pero sobre todo contigo mismo. La lectura ayuda al discernimiento y a ampliar tu lenguaje.
- Lo emocional. Las emociones son más rápidas que la razón y por ello debemos estar muy al pendiente de ellas. De allí la importancia de conocerlas, sentirlas y saber expresarlas; primero en uno mismo, pero también para entender a los demás. En estos momentos de pandemia, las emociones se desbordan más fácilmente pues estamos más vulnerables ante constantes presiones. La casa es oficina y escuela, diversos roles pasan en un mismo lugar y alrededor de la familia, por lo que la empatía es esencial. En este sentido, debemos estar muy conscientes de que las emociones se magnifican y cada persona las procesa como puede y de manera diferente. No todos tenemos el mismo procesamiento ni los mismos límites.
- Lo espiritual. En estos momentos de gran incertidumbre, desolación y constantes noticias adversas, nuestra mente deambula de un lado a otro. La mente es nuestra propia cárcel o liberación. Por ello, una buena práctica es la meditación, la cual te permite ir hacia adentro. Vivimos en un mundo en el que estamos reaccionando ante las circunstancias, las cuales por definición son cambiantes y ajenas a tu voluntad. Por ello, la meditación te permite conectarte con tu ser. Cuando meditas te das cuenta que el ser es más que la materia y tu esencia permanece en ti como la forma más profunda y constante de tu existencia. Por ello, está más allá de las circunstancias, su condición es la paz interior. Lo espiritual, va más allá de lo religioso, es la búsqueda del sentido de la vida.
Al ocuparnos de los cuatro aspectos fundamentales que tenemos como seres humanos: físico, intelectual, emocional y espiritual, así como de mantener su equilibrio, estamos mejorando nuestra calidad de vida y generando en nosotros mismos paz interna. Tenemos dos meses de este 2020 por delante. Hagamos que valgan la pena.
La paz interna tan anhelada se manifestará en cada acto que realicemos en el exterior, lo que será una gran aportación hacia ti mismo y hacia los demás.
Artículo por: Alejandro Herrera M. Las opiniones expresadas son solo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Revista Potencial Humano.