¿Cómo podemos ser felices en tiempos tan difíciles?
La filosofía siempre ha estado entre nosotros, aunque hay quienes se atreven a darle una fecha de nacimiento. Todos somos filósofos, de alguna forma u otra, pero los hay unos mejores que otros. Siempre será difícil escoger al mejor, pero siempre tendremos a nuestros favoritos. Hoy hablaré de uno al que me gusta abrazar cuando podría sentirme mejor: Séneca el Joven.
Gran orador, poeta, maestro, senador, consejero del César y gobernante tras bambalinas de Roma: fue un hombre que dedicó su vida a enseñarnos a valorar el pensamiento por encima del sentimiento. Creyó que podríamos atravesar por las peores situaciones si razonamos cada momento.
El ejercicio constante de la mente puede dárnoslo todo. ¿Quién no ha pensado en que las cosas sean distintas para hacernos felices por un rato? Cuando la vida se pone difícil, el pensamiento es una forma de aligerar la carga, dice. Defendió la moral que creyó perdida en una sociedad que buscaba la felicidad en las cosas; deseó poco y vivió sencillo.
En sus obras nos enseñó a lidiar con los pensamientos que dañan nuestra existencia, a liberarnos del pesar por nuestra propia fuerza y a nuestro favor. Nos consoló junto a su familia y nos dejó incontables aforismos. Era un sabio y vio uno en cada uno de nosotros.
Trabajó el conocimiento en búsqueda de la virtud y habló de cómo perseguirlo. Si vives de acuerdo con tus propios estándares no estarás insatisfecho por no lograr los impuestos por alguien más. Siempre con la vista en la verdad.
Seguimos en uno de los momentos más raros de nuestra historia y todos lo procesamos distinto. Si llegan esos ratos en los que la pasan mal: vayan por él y escúchenlo. Si ya lo conocen coincidiremos, si no lo han leído les digo que no tiene desperdicio, porque tal vez no nos haga mejores personas o nos alegre la vida por siempre, pero al menos nos pondrá a pensar en eso.
Nos invitó a generar conocimiento ya sea en la práctica como en la teoría, y a que lo compartamos con los demás. Nos invitó a ser nosotros mismos y a querer lo que hacemos. No me parece mala idea.
El pensamiento nos sacará adelante.