Potencial Humano

Liderazgo tóxico: cómo reconocerlo… incluso si eres tú

Esta charla no es para señalar al de arriba. Es para mirar al espejo.

Porque el liderazgo tóxico no siempre grita. A veces sonríe, motiva… y hace daño igual.

 ¿Qué es un liderazgo tóxico, realmente?

No se trata solo de abuso verbal o explotación directa.

Un liderazgo es tóxico cuando su presencia daña la confianza, bloquea el crecimiento o genera miedo constante. Y lo más peligroso: puede ser involuntario.

Crees que estás ayudando, pero en realidad estás creando dependencia. Tomas todas las decisiones, das todas las soluciones.

Tu equipo nunca crece porque nunca puede equivocarse sin que tú intervengas.

Síntoma: agotamiento crónico, microgestión, desmotivación de los demás.

Auto-pregunta: ¿Estoy resolviendo por otros lo que deberían resolver solos?

Eres optimista, siempre sonriendo… pero invalidas las emociones reales del equipo.

No hay espacio para el error, la queja o el conflicto. Todo debe “verse bien”.

Síntoma: cultura de silencio, frustración acumulada, burnout invisible.

Auto-pregunta: ¿Estoy usando el positivismo como excusa para no enfrentar la verdad?

No confrontas directamente, pero castigas sutilmente.

Controlas con sarcasmo, juicios velados, exclusión informal.

Síntoma: ambiente tenso, decisiones poco claras, miedo a discrepar.

Auto-pregunta: ¿Estoy castigando sin asumirlo?

No hay reglas claras. Un día eres comprensivo, al siguiente impredecible o irritable.

El equipo se adapta a ti, no al proyecto.

Síntoma: confusión, inseguridad, poca iniciativa.

Auto-pregunta: ¿Mi equipo trabaja para el objetivo… o para evitar molestarme?

Te crees humilde, pero siempre apareces en el centro.

Tomas crédito por el éxito y te distancias del fracaso.

Usas al equipo para brillar tú.

Síntoma: reconocimiento desequilibrado, rotación alta, resentimiento callado.

Auto-pregunta: ¿Cuántas veces uso la palabra “yo” al hablar del equipo?

¿Y si eres tú? ¿Y ahora qué?

Reconocerlo no es debilidad. Es madurez, responsabilidad y oportunidad de cambio real.

Los líderes tóxicos no siempre lo son por maldad. Lo son por automatismos no revisados, por miedo, por presión…

Pero eso no los justifica. Tú puedes ser uno de ellos.

Y también puedes dejar de serlo.

  • Pide feedback real. No esperes que te digan la verdad: crea espacios donde puedan hacerlo sin miedo.
  • Observa tus patrones en crisis. El verdadero líder se ve cuando todo va mal.
  • No confundas control con liderazgo. Lo primero ahoga; lo segundo libera.
  • Ten mentores que te digan lo incómodo. Alguien que te baje del pedestal a tiempo.
  • Hazte la pregunta que más incomoda: “¿Me gustaría ser liderado por mí, en mi peor día?”

El liderazgo tóxico no siempre lleva corbata y grita. A veces sonríe, se cree inspirador, y tiene seguidores que solo están esperando el momento para irse.

No hay liderazgo sin autoliderazgo. Y no hay autoliderazgo sin autocrítica brutal.

¿Tienes el coraje de preguntarte si el tóxico… podrías ser tú?


Conoce más temas sobre liderazgo en Potencial Humano

| Leer más

Liderazgo

Aiwifi y Omada de TP-Link impulsan la nueva era del WiFi inteligente para pymesOneFootball se consolida como la app deportiva #1 en México

La conectividad dejó de ser un servicio básico para convertirse en un activo de negocio.
Liderazgo

OneFootball se consolida como la app deportiva #1 en México

OneFootball se perfila como una de las plataformas más influyentes para vivir la cita mundialista de una manera única y completamente digital. Esta aplicación se ...
Liderazgo

SHA se asocia con WHOOP para mejorar su programa “Leader’s Performance”

SHA, la clínica y resort de longevidad líder del mundo, que cuenta con el respaldo de la ciencia, anuncia una colaboración exclusiva con WHOOP el innovador dispositivo ...
Scroll to Top